Thimothée Boucher

Es un chico bastante apuesto, aunque nada por lo cual destaque, su trabajo cargando cosas lo han hecho desarrollar un buen cuerpo, esbelto y con buena figura, esto también lo llevo a desarrollar brazos fuertes y resistentes, en una pelea cuerpo a cuerpo no tendría por que temer. Su cuerpo esta limpio de cicatrices o marcas, más que una en su pierna al nivel del gemelo derecho que tiene una marca en forma de media luna que se hizo por una quemadura cuando era pequeño y el que se curara algo mal quedo esa cicatriz. En lo que respecta a lo demás tiene bastante desarrollada la resistencia así como la capacidad pulmonar para estar debajo del agua unos segundos más de lo normal.
Tiene un tono de voz bastante calmado, relajado, suave, no demuestra agresividad aunque esto cambia cuando se enoja, su tono de voz se vuelve ronco y elevado, no controla esto a su gana si no que lo hacen las emociones.
De pelo castaño, lo lleva normalmente bastante desordenado, tirando el flequillo hacía arriba y a la misma vez hacía uno de los lados, algo que demuestra como unos pequeños tintes de rebeldía en su rostro. Con semblante serio y sin demostrar alguna emoción en particular, como si algún día le hubiera robado la capacidad de sonreír. Su rostro no tiene nada que se pueda destacar, más que sus ojos verdes casi transparentes se podría decir, como si fueran la puerta de su alma, con un brillo de luz interno. De piel clara, algo tostada de andar bajo los rayos del sol.
Se puede destacar que es alérgico al polen de ciertas flores, aunque no causan mas que una congestión nasal por irritación de las fosas nasales y garganta.

Aunque su cara no demuestre emociones, suele sentirlas y bastante fuertes. Con la gente desconocida suele ser reacio a relacionarse, le cuesta confiar y es bastante inseguro por lo cual prefiere demostrar un perfil más recto, duro y no demostrar ninguna emoción que pueda demostrar que la otra persona entro en confianza con él. Aunque en su interior sea todo lo contrario, esto solo lo ven aquellas personas que para él significan algo y por el momento no existe ninguna así, ni su familia. En su interior es alguien tímido en parte, dulce y algo sensible, pero claro esta, que se debe de destacar que es dulce, tan dulce como la miel, le encanta atender a quien ama, protegerlo aunque el demande más protección de la que puede llegar a dar, entregado a la persona que ama, lo da todo por ella y eso en cierta parte puede presentar un problema, porque si tuviera que dar la vida... la daría. Su familia le representa un gran dolor, no le gusta hablar del tema, porque cuando lo hace seguramente termina llorando, entre el rencor y lo mal que le sienta el que no se preocupen por él, lo suele amargar bastante lo que termina siendo demostrado a través de lagrimas, su voz se nubla y un nudo le aprieta la garganta.
Aunque se basa en una fortaleza propia, en el instinto de supervivencia para vivir, saca fuerza de un objetivo; encontrar alguien en quien poder confiar y recuperar algo del amor que nadie le da, dejar de sentirse como una mascota.

Le gusta el calor del fuego, por lo cual se pasa largos ratos sentado frente a la chimenea y si es acompañado de algo dulce mucho mejor, los potres son una de sus debilidades en lo que es la comida, lo único que detesta comer es cosas que estén demasiado saladas o con mucha azúcar en su preferencia, la comida debe de ser algo picante aunque sin que moleste y lo dulce algo ácido . Aunque también le gusta la naturaleza, puede pasarse horas sentado bajo un árbol o sobre una colina observando el horizonte o como un niño pequeño las nubes tratando de descubrir formas en ellas, claro esta también que en estos entornos suele practicar sus poderes con frecuencia, por no decir que lo hace todos los días.

Sus colores preferidos son el azul oscuro, el rojo, el negro y el plateado, este ultimo por lo brillante y la forma en que refleja la luz, le gusta como queda en los detalles sobre cosas de colores negro y rojo.
Sus habilidades son principalmente el control de sus habilidades, las armas blancas y suele llevarse bien con los animales por lo que se le da bien adiestrarlos para su uso o como mascotas, aprende rápido y desarrolla las habilidades fácilmente, no le cuesta para nada. Tiene gran habilidades con las manos, ya que se crió dentro de artesanos por lo que suele arreglar las cosas de la casa y fabricar lo que se pueda necesitar, es bueno cultivando y principalmente cocinando.

En tema sexualidad, es algo confuso no sabe si le gustan las mujeres o los hombres, por lo cual nunca negaría la posibilidad de enamorarse de un hombre tanto como una mujer, no siente una fuerte atracción a uno más que al otro. Tiene un punto débil, como un talón de aquiles en su cuello cerca de la nuca casi pegado a la espalda, así como cosquillas en la parte de sus costillas.

A lo que respeta la religión, este sin duda alguna es un tema complicado de tratar, fue criado y enseñado a adorar a dioses y en especial a uno, aunque de esto no cree nada, le parecen mentiras aunque demuestre lo contrario. No quiere andar discutiendo cosas por las cuales la mayoría de las personas están cegadas. Si existe un bien y un mal, un infierno y el cielo, suele cuestionarse ¿Por qué esta viviendo, lo que vive? A lo cual, no cree la existencia de ninguno de ellos, tiene la fuerte creencia de que si existieran ya habrían castigado a quienes lo merecen y a quienes no, los hubieran recompensado. A donde estaban esos seres que les llamaba Dioses cuando las personas los necesitaban, cuando el los necesitaba, él no había cometido asesinatos como otros tantos que gozaban de riquezas mientras él apenas tenía para vivir.
Y tanto como es la religión de delicada, también lo es la política. En este tema no se suele meter, le da bastante igual, mientras lo beneficien o al menos se mantengan neutral no le interesa, tal vez podría recibir más ayuda de esos que dicen ser los que gobiernan o como quieran llamarle ellos, pero al igual que los dioses no cree en ellos, no son más que unos cuantos con dinero que hacen y deshacen lo que quieren a su gusto y gana.
La ayuda no viene de arriba, si no lo haces tu con tus propias manos, no lo hará nadie por ti, ese es un fuerte pensamiento de este chico, prefiere luchar y trabajar de sol a sol que recibir una ayuda de ellos. Aunque se sigue destacando, que es un tema que no le gusta tratar, prefiere evitarlo... Es uno de los temas principales de peleas y discusiones, cree él.

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“La sombra no existe; lo que tu llamas sombra es la luz que no ves.”

Así era como comenzaba la historia de un niño el cual no sería muy agraciado en la vida, unos padres que realmente no se preocupaban mucho por él y una sociedad a la cual no terminaba de comprender.
Nació en el seno de una familia un poco pobre, no era que tuvieran que mendigar por comida, pero tampoco tenía todos los lujos o cosas que un niño hubiera podido desear, los juguetes eran dos o tres cosas que los vecinos le habían dado de sus hijos ya mayores y la ropa, bueno era lo que su madre le podía conseguir.
Desde pequeño se sentaba todas las tardes en la puerta de la casa a mirar hacía afuera, tratando de aprender un poco de aquel mundo que lo rodeaba, algo raro para ser sincero, un pequeño curioso y lleno de ganas de entender todo aquello que veía, además claro, de querer aprenderlo.
Sus padres eran pequeños artesanos y como todos sabían sus ingresos no daban para mucho más que cubrir sus necesidades, pero nada de caprichos… no se podían dar el lujo, el dinero que poca vez sobraba era guardado para tiempos de escases o cuando lo necesitaban con extrema urgencia.
Por más que a veces la familia necesitara manos de ayuda, no permitieron que el pequeño lo hiciera, recibió una educación en los centros de educación públicos, no era que tuviera una asistencia perfecta ya que muchas veces se escapaba a ayudarle con las cosas a su padre, pero aun así era buen alumno en lo que respecta a lo que se les enseñaba, aunque claro, prefería el libertinaje y andar por las calles de aquí para allá aprendiendo toda técnica que podía.
A los 14 esto se le terminaría, ya no podía conseguir una educación mayor, el dinero no era suficiente como para que la obtuviera y era necesario que ayudara en el “negocio” familiar, ahora podría cargar con cosas más pesadas y tal vez ayudarle a fabricar algunas cosas a su padre o incluso ayudarle a cocinar a su madre.
Poco a poco crecía aquel pequeño de cara inocente, pero cada día comenzaba a notar aun más la despreocupación de sus padres por él, ahora cocinaba él solo para la familia, cargaba con las cosas… solía pensar que era un burro de carga, y peor aun cuando nació su hermana, una niña hermosa a la cual le daban todos los gustos que era posibles, hasta incluso gastaban el dinero ahorrado para aquella niña.
Pronto llegó un nuevo cumpleaños del cual no se acordó nadie en su familia, ese día se fue a una colina toda la tarde a jugar con aquellas pequeñas luces que lograba crear, usando sus poderes de aquí para allá, tratando de ocultar amargas lagrimas de dolor. Era difícil soportar aquello, con 17 años cumplidos y que tus padres no se acordaran de tu cumpleaños hacía que cada día la vida de aquel chico no fuera lo que él esperaba. Cada día ayudaba en la casa, en la tienda y cuando le era posible y a escondida de los ojos de su familia, corría hacía lugares deshabitados, a tal vez una montaña, un bosque, lo que fuera, pero lejos de aquellas personas que le causaban un dolor que lo estaba matando por dentro.
En esos lugares podría practicar libremente sus habilidades con la luz, no era mucho lo que hacía ya que jamás había tenido un mentor y su familia no era que le explicara mucho sobre el tema, sino que, no le decía absolutamente nada… era como que si quisieran que jamás descubriera esa parte de él mismo.

Cada día era una lucha por sobrevivir con aquel dolor, pero que hacer cuando eso es lo único que tenia, irse del lugar no podía... no tenía techo que no fuera ese, ni trabajo que no fuera el que sus padres le daban, además el dinero que podía llegar a ahorrar no le duraría más para que vivir 2 o tal vez 3 días... Era como una mascota mal atendida, tenia casa y comida pero... nada de amor, compresión o diversión.

La vida de Thimothée no es que cambiara mucho durante su vida, no tiene nada importante que mencionar o destacar, más que el nacimiento de la niña "apestosa" como le decía él, así los años pasaban uno tras otro, día tras día era la misma rutina, trabajar y escapar a lugares apartados. Muy pocas veces salia a caminar por las calles de la ciudad, pero a veces necesitaba hacerlo para saber que era lo que se hablaba, lo que hacían o vendían.

Los 22 años de Thimothée llegaron de igual manera que los otros, sin que su familia se acordara de él, sin regalos ni tarta con la cual festejar dicho acontecimiento, no entendía realmente por que razón seguía en esa familia, pero ese día no se iba a quedar en aquella casa, paso todo el día practicando sus poderes hasta el agotamiento, hasta caer rendido sobre sus rodillas agotado. En cuanto toco el suelo, las lagrimas inundaron sus ojos y comprendió que si no luchaba por su vida, por encontrar algo mejor, la vida que estaba viviendo lo iba a terminar destruyendo.